Gears of War es el shooter en tercera persona con coberturas por antonomasia. EPIC Games rentabilizó el descanso de siete años sin publicar ningún juego para ofrecernos una obra que ha creado escuela desde que fue lanzado en 2006 para Xbox 360 y para PC un año más tarde, que es la versión que nos ocupa.
Jugabilidad e historia:
No es que la historia sea demasiado elaborada (aunque la ambientación es genial) ni el guión nos mantenga en tensión con diálogos brillantes. Aquí la profundidad la otorgan los propios combates, los cuales son una auténtica gozada. Las armas están muy bien recreadas, el sistema de recarga le da un extra de diversión y la buena IA de los enemigos terminan de completar uno de los mejores juegos que jamás se han creado en cuanto al combate puro y duro se refiere. Desafiante, profundo, adictivo y muy divertido... Desde la primera vez que jugué al primer Halo no había experimentado nada parecido en cuanto a acción con disparos de por medio.
Mención aparte merece el sistema de coberturas. Cierto que no fue el primer juego que las utilizó ni mucho menos (para eso tenemos el clásico WinBack de N64, editado en 1999) pero sí que les otorgó un protagonismo nunca antes visto, haciendo cada combate un placer y a la vez influenciando a decenas de títulos que estaban por venir en años venideros. ¡Lástima que el juego no durase un par de horas más!
Apartado visual y sonoro:
Tuve el placer de probar la versión de Xbox 360 y la verdad es que en compatibles el juego se veía bastante mejor. Las texturas adquirieron un detalle casi insultante, la iluminación y los shaders nos dejaron con la boca abierta y las animaciones hiperrealistas hacían de cada combate un espectáculo visual que entraba por los ojos. Y de qué manera.
Fue el primer juego junto con Roboblitz que utilizó el motor gráfico Unreal Engine 3, que fue sin duda el motor más usado durante la pasada generación y el que nos mostró a todos lo que los gráficos de nueva generación podían ofrecer. Desde entonces hemos visto una evolución considerable con otros motores como el CryEngine, pero quizá no con el impacto que supuso este Gears of War. ¿Y esos efectos gore? Brutales, siguen siendo de los mejores y más realistas que he visto en ningún videojuego.
El apartado sonoro destaca no sólo por los magníficos efectos sino sobre todo por la excepcional banda sonora de Kevin Riepl, la cual suena casi en todo momento ambientando la acción de manera excelente y añadiendo un toque muy cinematográfico a la ya de por sí peliculera puesta en escera de la que hace gala el juego.
Conclusiones:
Como puntos negativos, destacar sobre todo la escasa duración de la aventura pese a los niveles extra que incluía esta versión de PC, la poca interactividad de los escenarios tan típica del Unreal Engine 3 y algunos bugs que he detectado en cuanto a la física (zonas en las que te quedas atascado sin poder salir, enemigos que se te quedan pegados al cuerpo)
Pero estos puntos negros son nimiedades en comparación con las grandes virtudes de este juego, cuya adaptación a PC consiguió superar a la ya de por sí magnífica versión de Xbox 360. Es divertido como pocos, rejugable y si te va la acción en tercera persona, es un auténtico "must have" al que no te cansarás de jugar.
Calificación: *****